Invertir en oro

Si busca inversiones seguras invertir en oro es una excelente opción, ahora bien para invertir con seguridad (permítase la redundancia) en el áureo metal es imprescindible que conozca algunos aspectos imprescindible sobre este tipo de inversión.

Conociendo las inversiones en oro

Lo primero que debe decirse es que el oro es un excelente elemento para invertir en él, pero nunca debe de ser el único elemento en el que se invierte. Dicho de otro modo, si usted tiene 100  puede invertir 10, 15 ó 20 en oro, pero no más.

Además, resulta muy importante que el oro no es una inversión que usted deba realizarse a corto plazo, si invierte en oro pensando en el corto plazo probablemente perderá, invierta pensando en el largo plazo, el oro puede ser un excelente complemento para su jubilación por ejemplo, pero el oro no debe de ser considerado como una acción.

Siga la fluctuación del mercado, pero no se obsesione con ella. En el oro  no es tan importante comprar ahora o más tarde, comprar cuando esta barato o cuando está más caro. Si usted invierte en esa dinámica de “comprar barato y vender caro” nuevamente probablemente perderá. Usted simplemente vaya comprando oro según sus posibilidades, vaya comprando recurrentemente oro sin fijarse en cómo cotiza ese día. Cómprelo y guárdelo, ya que en el largo plazo obtendrá la revalorización.

Entienda perfectamente que no todo aquello que se llama invertir en oro es invertir realmente en oro. Si busca seguridad en sus inversiones escape de los productos instrumentados en oro, referenciados en índices que replican el oro o en acciones de compañías mineras extractoras de oro, ¡eso no es invertir en oro! Tampoco es invertir en oro (para los efectos que aquí ocupan de invertir con seguridad) el comprar oro de joyería, este oro no es oro de inversión puro, además viene cargado con el IVA (al contrario del oro de inversión) lo que lastra su rentabilidad y además cuando usted compra oro de joyería compra un diseño, un trabajo del joyero y en parte oro, pero no está comprando sólo oro.

Poseyendo el oro

Invertir en oro realmente es invertir en lingotes o piezas de oro directamente (tampoco en monedas de oro), eso es invertir en oro y eso es lo que más allá de las manipulaciones de los organismos oficiales en su cruzada para salvaguardar el dinero fiduciario no perderá su valor, puede pasar por temporadas de bajada como es obvio, y debe pasarlas pues no sería sostenible un crecimiento vertical infinito, pero se asuste, a la larga subirá, hace miles de años que sube, seguirá subiendo (sí, aunque ahora esté bajando después de una década de impresionantes, subirá. Además, tenga presente que muchos de estos periodos de bajada no tienen tanto que ver con el oro físico real, sino con el “oro papel” que distorsiona el mercado).

Uno de los impedimentos de invertir en oro es su coste de custodiarlo. Lo más recomendable no es que se lo custodien en las mismas tiendan que le vendan oro (por muy grandes que parezcan), son una opción válida y segura, sí, pero no se la juegue por si un día desaparecen. Le dirán que están aseguradas, sí, pero no ante una quiebra. En caso de quiebra puede tener problemas para recuperar el oro acumulado.

Lo mejor es que asuma por usted mismo la custodia, no es costoso. Lo mejor es disponer de una cierta cantidad de oro en una caja fuerte de su casa y que en el seguro de la vivienda de su hogar asegure ese capital (compruebe que la compañía realmente le asegura ese bien o introduzca un suplemento para asegurar ese valor como bien especial), ponga usted un límite de valor en el hogar para que el seguro no se le exceda mucho en su coste.

Luego, cuando usted haya alcanzado el valor en oro del límite asegurado que tiene en su hogar vaya depositando el excedente en una caja de seguridad de un banco de su localidad, o localidad cercana. Estas cajas de seguridad no le costarán mucho dinero al año, asegúrese del seguro que incluye su caja de seguridad bancaria.

Tenga presente que ante una posible quiebra personal suya o lo que fuere las cajas de seguridad son prácticamente inviolables y usted no tiene que declarar lo contenido en ellas. Cierto es que el fisco en la actualidad ha instado a la ejecución de algunas cajas de seguridad de grandes deudores, pero cierto es también que esas son medidas extremadamente excepcionales y además no exentas de controversia legal y judicial.

Finalmente, si usted va acumulando patrimonio en oro, una última recomendación. Si tiene la posibilidad diversifique su riesgo y acumule también patrimonio en otra caja de seguridad bancaria fuera de su país, ideal un banco principal de un país seguro fuera de la UE como son los EUA; ello le permitirá disponer de otro seguro para una nueva caja de seguridad, doblar su capacidad de almacenar oro y diversificará el riesgo por si un día la economía o sociedad española/europea o la estadounidense quebrase o entrase en grave conflicto. Siempre le quedaría un patrimonio salvaguardado en uno de los dos grandes bloques mundiales.

Tenga presente que para realizar lo anterior usted debe desplazar el oro hasta su país de destino y que aplican límites de valor para poderlo llevar. Es aconsejable que lo lleve usted mismo y que conserve y lleve todas las facturas encima en el aeropuerto para demostrar el valor y que todo es legal.

No se fie sólo en la cotización en euros, el oro es un valor que usted puede convertir en liquido en cualquier lugar del mundo y en cualquier divisa, los valores son distintos, igual gana más si por ejemplo lo compra en euros y lo vende en USD, o al revés, cuando vaya a vender compruébelo, si dispone de oro en dos zonas económicas distintas le será más fácil.

Finalmente, indicarle que cuando compra oro de inversión siempre sale más rentable comprar piezas más grandes que pequeñas, hágalo en la medida de lo posible, pero no invierta todo a una pieza, el oro no se puede trocear y siempre es bueno que disponga de distintas piezas para que si el algún momento necesita desprenderse del oro para obtener liquidez no tenga que desprenderse de todo, sobre todo si en ese momento coincide que el oro está  bajando o por debajo del coste (precio de compra que incluye el valor del oro en sí mismo y el margen comercial de quien se lo vendió) al que usted lo adquirió y, en consecuencia, se encuentra en rentabilidad negativa.